Al menos 20 personas, entre ellas nueve policías, resultaron heridas por la fuerte explosión registrada este viernes en una gasolinera en el sureste de Roma, que también ha provocado varios incendios y una gran columna de humo visible desde distintos puntos de la ciudad, además de daños en edificios cercanos.
Nueve agentes de policía han sufrido heridas de diferente consideración, aunque ninguno de ellos corre peligro de muerte, según confirmaron fuentes de la Jefatura de Policía, así como personal de emergencias, sin descartar más afectados entre los viandantes y los residentes en edificios cercanos.
La potente deflagración, que se escuchó en toda la ciudad, ocurrió en torno a las 8:00 hora local (6:00 GMT) en el barrio del Prenestino, en el sureste de la capital, y las primeras hipótesis señalan que los bomberos habían sido alertados por un camión que había golpeado una tubería, según medios locales.
Cuando llegaron, se produjo la gran explosión, que precedió a otras menos potentes y provocó una densa columna de humo negro y un gran incendio. Las llamas ya están controladas.
El número de heridos es por ahora de al menos 20 personas, según la mayoría de los medios locales, aunque aún existe confusión respecto a la cifra de afectados y no se descarta que pueda seguir aumentando.

Cinco han sido trasladados al hospital, entre ellos un efectivo de bomberos, según confirmó el propio cuerpo de emergencias.
Se han encontrado escombros de la estructura dispersos hasta a 300 metros del lugar de la explosión.
Las autoridades han cerrado una estación de metro cercana y acordonado la zona para evitar el acceso de transeúntes, mientras se evalúan los daños y se garantiza la seguridad en el área.
Hasta el lugar se han desplazado 10 dotaciones de bomberos que tratan de extinguir las llamas que afectan al depósito legal de la zona situada detrás de la gasolinera.
Además, los medios locales señalan que también se han evacuado un centro deportivo cercano y dos edificios residenciales.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, está en contacto con el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, para seguir de cerca las consecuencias del incidente, según confirmaron a la agencia de noticias EFE fuentes de la presidencia del Gobierno italiano.
“Expreso mi cercanía a todos los heridos, incluidos los agentes del orden, los bomberos y el personal sanitario, y hago llegar mi más sincero agradecimiento a quienes participaron en las operaciones de rescate y seguridad”, escribió Meloni en X.

Mientras que el ministro del Interior, Matteo Piantedosi, aseguró que sigue “con especial atención el estado de los heridos, especialmente el de los agentes de policía y los bomberos que intervinieron rápidamente para prestar los primeros auxilios”.
Quien también se expresó en redes sociales fue el papa León XIV: “Rezo por las personas involucradas en la explosión de una gasolinera, ocurrida esta mañana en el barrio Prenestino Labicano, en el corazón de mi Diócesis. Sigo con preocupación el desarrollo de este trágico accidente", escribió en X.

Las autoridades indicaron que las operaciones de rescate fueron difíciles porque junto al distribuidor había una estación de ambulancias con bombas de oxígeno en su interior, circunstancia que pudo haber provocado las explosiones. Así lo declaró el mayor de los Carabineros, Andrea Quattrocchi, en el lugar de la explosión en Roma. “Se están investigando las causas y la zona ha sido asegurada”, expresó.