Cómo es la espada Linschoten, el tesoro de la Edad Media que se exhibe en los Países Bajos

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a espada Linschoten mide una espada Linschoten mide un metro de largo, pesa 840 gramos y conserva detalles originales. Se exhibe en el Museo Nacional de Antigüedades de Leiden - (Museo de las Antigüedades)

Entre los múltiples secretos que la tierra guarda desde tiempos remotos, hay objetos que, cuando emergen, nos conectan de manera directa con las historias y los símbolos de un pasado que creíamos olvidado. Tal es el caso de la espada Linschoten, una joya de la Edad Media descubierta por pura casualidad en un pequeño río de los Países Bajos y que hoy cautiva a historiadores, arqueólogos y visitantes por igual.

No es frecuente que un objeto de casi mil años aparezca en tan buen estado de conservación. Lo habitual es encontrar fragmentos, partes corroídas o simplemente vestigios difíciles de interpretar. Pero esta espada, hallada en 2024 durante unas obras de mantenimiento en el río Korte Linschoten, sorprendió por su integridad, belleza y riqueza simbólica. Se trata de un arma forjada entre los años 1050 y 1150, con grabados únicos y un diseño que revela tanto destreza técnica como profundidad espiritual.

Hoy, esta pieza medieval se encuentra en el Museo Nacional de Antigüedades (RMO) de Leiden, y se convirtió en una de las protagonistas indiscutidas de la vitrina de nuevas adquisiciones. Pero antes de llegar a las salas del museo, la espada pasó por un fascinante recorrido que empieza con un golpe de pala y termina con una reflexión sobre la complejidad cultural de la Europa medieval.

La espada fue hallada porLa espada fue hallada por obreros durante el dragado del río Korte Linschoten, en marzo de 2024. Su estado de conservación sorprendió a los arqueólogos - (Museo de las Antigüedades)

La historia de este hallazgo tiene más de fortuito que de planeado. En marzo de 2024, un equipo de obreros trabajaba en el dragado del río Korte Linschoten, ubicado en la provincia de Utrecht, cuando una de las excavadoras levantó algo más que sedimentos. Una punta metálica sobresalía entre el barro, y pronto se reveló que se trataba de una espada antigua.

El contratista, consciente de que podía tratarse de un hallazgo arqueológico, notificó a las autoridades de Montfoort. La espada fue entregada a los arqueólogos del servicio ambiental regional, quienes confirmaron su relevancia histórica. El objeto, bautizado como espada de Linschoten, en honor al sitio del hallazgo, medía un metro de largo, tenía una guarda de 17 centímetros y pesaba apenas 840 gramos.

Su ligereza y equilibrio indicaban que había sido fabricada a medida para su portador, probablemente alguien de estatus elevado. Además, las radiografías revelaron restos de madera y cuero en la empuñadura, lo que sugiere que se conservaba parte del revestimiento original. La preservación se debe, en gran parte, al suelo arcilloso y húmedo de la zona, que evitó la oxidación del metal durante casi mil años.

Uno de los aspectos más intrigantes de la espada es su decoración simbólica. En una de sus caras, se grabó un motivo conocido como el “nudo infinito”: un patrón geométrico compuesto por cinco cuadrados entrelazados dentro de un círculo. Este símbolo no es casual. Se trata de un emblema muy común en las tradiciones vikingas y germánicas tempranas, donde se lo asociaba con la unidad espiritual, la eternidad, la protección y los lazos inquebrantables.

En el reverso de laEn el reverso de la espada aparece grabada una rueda solar, símbolo sagrado usado en la consagración de iglesias medievales - (Museo de las Antigüedades)

La elección de este símbolo sugiere que la espada no era simplemente un instrumento de guerra, sino que cumplía un propósito ceremonial o incluso ritual. No se descarta que haya sido utilizada en contextos religiosos, como consagraciones o funerales, o como objeto de poder destinado a marcar la autoridad de su propietario.

En el reverso de la hoja, presenta otro símbolo poco común: una “rueda solar” o sonnenrad, formada por un círculo atravesado por una cruz. En la Edad Media, este emblema se utilizaba en regiones recién cristianizadas para consagrar iglesias, y se lo consideraba un signo de protección divina. La coexistencia de ambos símbolos—uno de tradición pagana y otro cristiano—refleja la transición cultural de la época, donde se mezclaban creencias ancestrales con el avance del cristianismo.

Tras su recuperación, la espada fue donada al Rijksmuseum van Oudheden (Museo Nacional de Antigüedades) en Leiden. Allí fue sometida a un tratamiento de conservación de 10 semanas que incluyó la extracción de sales y la estabilización del metal mediante un proceso con taninos. El resultado permitió preservar tanto la hoja como algunos de sus detalles originales.

Desde mayo de 2025, la espada se encuentra en exhibición dentro de la Vitrina de Adquisiciones, una zona de libre acceso ubicada en el Salón del Templo, justo detrás del templo egipcio del museo. La exposición estará abierta al público hasta agosto o septiembre de 2025, y ya atrajo a miles de visitantes interesados en este excepcional hallazgo.

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