
Devin Bush, linebacker de los Cleveland Browns, fue arrestado el domingo en Bell Acres, Pensilvania, acusado de agresión simple y acoso tras un presunto incidente de violencia doméstica, según documentos judiciales citados por ESPN, NFL.com y CBS News.
La policía respondió a una llamada en una vivienda ubicada en un suburbio de Pittsburgh. Una mujer, identificada como la pareja de Bush, denunció que él la agredió físicamente tras una discusión. Según la denuncia penal, durante el altercado, la mujer comenzó a grabar la confrontación con su teléfono móvil, lo que llevó a Bush a perseguirla dentro de la casa. Ella relató que fue inmovilizada contra una camilla de masajes, mientras Bush ejercía presión con todo su peso corporal. Luego, el jugador le arrebató el teléfono y lo destruyó. La mujer abandonó la vivienda con su hija y se refugió en la casa de un vecino.
Los agentes que acudieron al lugar encontraron cortes visibles en la muñeca y el pie derecho de la denunciante, además de restos del teléfono destruido. Bush admitió haber roto el dispositivo, pero negó haber actuado con violencia física. Fue arrestado y posteriormente liberado bajo fianza no monetaria. Su audiencia preliminar está programada para el 20 de mayo en un tribunal del condado de Allegheny.
El equipo de los Browns declaró el lunes que está “al tanto y recabando más información”. Bush, de 26 años, firmó en marzo un contrato por un año y 3,25 millones de dólares para continuar con el equipo, luego de participar en 16 partidos durante la temporada 2024, en la que fue titular en 10 encuentros y registró 76 tacleadas.
Bush fue seleccionado por los Pittsburgh Steelers con la décima selección global del Draft de la NFL en 2019. Tras cuatro temporadas con ese equipo, jugó en 2023 con los Seattle Seahawks y se unió a los Browns en 2024. En su carrera ha disputado 81 partidos, con 61 como titular, sumando 299 tacleadas, cinco capturas y dos intercepciones.

Aunque aún no hay sanción oficial, la NFL podría aplicar medidas disciplinarias en virtud de su política de conducta personal, incluso si no se llega a una condena penal.
El exjugador de la NFL, Adrian Peterson, fue arrestado el 25 de abril en el condado de Hennepin, Minnesota, bajo sospecha de conducir bajo los efectos del alcohol. Según informó ABC News, la detención ocurrió durante la madrugada, cuando la Patrulla Estatal de Minnesota detuvo su vehículo por circular a 133 kilómetros por hora en una zona con límite de 88 kilómetros por hora.
Tras una prueba de alcoholemia, se determinó que Peterson tenía un nivel de alcohol en sangre de 0,14. Fue arrestado alrededor de las 3:20 a.m. y trasladado a la cárcel del condado, donde fue ingresado oficialmente a las 5:16 a.m., informó Sports Illustrated.
Peterson enfrenta un cargo de cuarto grado por conducir en estado de ebriedad, clasificado como delito menor en Minnesota. De acuerdo con los registros judiciales, la fianza fue fijada en 4.000 dólares y la primera comparecencia ante la corte está prevista para el 9 de mayo.
El día anterior al arresto, Peterson había participado en un evento del draft de la NFL en el Estadio U.S. Bank de Minneapolis, donde compartió el escenario con una estación de radio local, según destacó Fox News.

Medios como Bring Me The News, citados por Sports Illustrated, indicaron que el cargo en su contra suele aplicarse a infractores primerizos o a personas con niveles de alcohol inferiores a 0,16. La policía no ha entregado más detalles sobre el caso.
El exjugador ya había enfrentado procesos judiciales en el pasado, incluyendo una acusación por violencia doméstica que derivó en su participación en un programa de rehabilitación con asesoramiento sobre violencia y consumo de alcohol.
Peterson fue reclutado por los Minnesota Vikings en 2007 y es considerado uno de los corredores más destacados en la historia del equipo. Fue nombrado Jugador Más Valioso de la NFL en 2012 y es el líder histórico de la franquicia en yardas terrestres y touchdowns por carrera.