Édgar Berlanga se autoproclama "Rey de Nueva York" previo a su pelea con Hamzah Sheeraz

Con la fecha de su próximo enfrentamiento acercándose, el boxeador neoyorquino Édgar Berlanga no ha escatimado en declaraciones audaces, autoproclamándose el “Rey de Nueva York” mientras se prepara para su duelo crucial contra el invicto británico Hamzah Sheeraz.

La contienda, que promete ser electrizante, está programada para el sábado 12 de julio de 2025, en el icónico Louis Armstrong Stadium de Queens, un escenario poco convencional para el boxeo, pero con la capacidad de albergar a miles de fanáticos.

Berlanga, con un récord de 23 victorias y solo 1 derrota, se ha mostrado sumamente confiado y confrontativo en la antesala de la pelea. En un video promocional, se presentó con el título de “Rey de Nueva York”, una afirmación que, si bien ha generado críticas por parte de algunos que señalan su falta de un título mundial significativo y la rica historia de leyendas neoyorquinas como Mike Tyson, no ha mermado su seguridad.

Las explosivas declaraciones de Berlanga

El púgil boricua-estadounidense no se guardó nada al hablar de su oponente y de sus intenciones. “Voy a ir ahí y lo voy a lastimar”, sentenció Berlanga, añadiendo con vehemencia: “Voy a romperle cada hueso de la cara. Voy a noquear a este hijo de p***”.

Además, Berlanga sugiere que Sheeraz no tuvo más remedio que aceptar esta pelea, pues le habrían prometido un enfrentamiento contra el supermediano Canelo Álvarez si lograba una victoria. “No tuvo más remedio que aceptar esta mierda para intentar conseguir la pelea con Canelo, porque le prometieron esa pelea”, afirmó.

Berlanga no solo se enfoca en el presente, sino que también ve esta pelea como un trampolín para su futuro. Calificando a Sheeraz (21-0-1, 17 KOs) como un “peleador nivel C” (aunque otros lo consideren nivel B pero vulnerable), ha expresado su creencia de que Sheeraz “recibió un regalo” en su último combate, un empate controvertido contra Carlos Adames. Para Berlanga, esta pelea es su “fiesta de presentación” y el momento de demostrar que está “de vuelta con todo”.

A pesar de las críticas que puedan surgir por sus declaraciones, Berlanga se mantiene firme en su autoproclamación y en su determinación. “Estamos en Nueva York, este es mi patio trasero”, enfatizó. La presión es alta para Berlanga, ya que una victoria contundente, idealmente por nocaut, no solo solidificaría su estatus en el peso supermediano, sino que también lo acercaría a las grandes peleas por las que ha estado anhelando.

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