WASHINGTON - Estados Unidos impuso este jueves sanciones a cuatro juezas de la Corte Penal Internacional (CPI) por una orden de detención contra el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu e investigaciones sobre soldados estadounidenses.
El gobierno del presidente Donald Trump prohibirá a las cuatro juezas la entrada en Estados Unidos y congelará sus propiedades o haberes en el país.
"Estados Unidos tomará todas las medidas que considere necesarias para proteger nuestra soberanía, la de Israel y la de cualquier otro aliado estadounidense de las acciones ilegítimas de la CPI", afirma el jefe de la diplomacia, Marco Rubio, en un comunicado.
"La CPI está politizada y reivindica falsamente una discrecionalidad sin límites para investigar, acusar y procesar a nacionales de Estados Unidos y de nuestros aliados", añade.
El secretario de Estado llama a los países que "aún apoyan" al organismo con sede en La Haya a luchar "contra este vergonzoso ataque".
"Orden de detención"
Dos de las juezas, Beti Hohler, de Eslovenia, y Reine Alapini-Gansou, de Benín, participaron en los procedimientos que condujeron a la orden de detención dictada en noviembre contra Netanyahu.
El tribunal encontró supuestos "motivos razonables" de responsabilidad penal contra Netanyahu y el exministro de Defensa israelí Yoav Gallant por crímenes de guerra y contra la humanidad en la ofensiva masiva en Gaza tras el ataque sin precedentes de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023.
Las otras dos magistradas, Luz del Carmen Ibáñez Carranza, de Perú, y Solomy Balungi Bossa, de Uganda, formaron parte del proceso que condujo a la autorización de una investigación sobre militares estadounidenses acusados de haber cometido crímenes de guerra durante la guerra de Afganistán.
Ni Estados Unidos ni Israel forman parte del Estatuto de Roma que estableció la Corte Penal Internacional y, por lo tanto, no reconocen su capacidad para procesar a sus nacionales.
Fundada en 2002, la CPI cuenta con 124 Estados miembros y solo ha dictado un puñado de condenas desde su creación.
Durante el primer mandato de Donald Trump (2017-2021), la CPI, y en particular su entonces fiscal Fatou Bensouda, ya habían sido objeto de sanciones estadounidenses, levantadas por su sucesor Joe Biden poco después de asumir el cargo.
FUENTE: Con información de AFP