
La investigación por la muerte de Nola Dinkins, una niña de tres años, ha generado atención nacional por la gravedad de los hechos y la participación de la madre y su pareja como principales acusados. El caso expuso deficiencias en los sistemas de protección infantil de Maryland y Delaware después de que el cuerpo de la menor fuera hallado dentro de una maleta tras una denuncia de secuestro que resultó falsa. La Policía Estatal de Maryland (MSP), junto a otras autoridades, ha divulgado detalles sobre las circunstancias en las que se realizó el hallazgo y se procesaron las detenciones, mientras la comunidad permanece alerta al avance del proceso judicial.
El 10 de junio, Darrian Randle, madre de la víctima, reportó la supuesta desaparición de Nola en Newark, Delaware. El caso motivó una Alerta Amber inmediata y el despliegue de fuerzas de seguridad en las últimas ubicaciones conocidas de la familia. Randle manifestó desconocer el paradero de su hija. Sin embargo, las primeras pruebas recolectadas en el hogar despertaron sospechas entre los investigadores, lo que llevó a un giro en la dirección del caso.
Tras estos procedimientos iniciales, la policía localizó a Cedrick Antoine Britten, pareja de Randle, en la vivienda situada en North East, Maryland. Britten fue interrogado y, conforme a documentos judiciales citados por medios nacionales y locales, brindó información que permitió identificar el lugar exacto en el que se hallaba el cuerpo de la menor, según WBAL-TV. El hallazgo del cadáver, así como las evidencias reunidas, dieron inicio a un caso penal de alto perfil en la región.
El cuerpo de Nola Dinkins fue localizado en el interior de una maleta en un lote baldío de North East, Maryland. La Policía Estatal de Maryland confirmó la identidad de la víctima mediante análisis forense, además de reportar que el cuerpo se encontraba envuelto en plástico y presentaba signos de desnutrición. Los oficiales indicaron que el hallazgo se originó por un mapa facilitado por Cedrick Britten, quien colaboró con los investigadores al señalar el sitio donde se encontraba la maleta.
Según documentos judiciales, Randle habría confesado ante las autoridades que golpeó a la niña con un cinturón hasta dejarla sin conocimiento. Los informes detallan que, tras el incidente, el cuerpo fue trasladado y ocultado por varios días en la residencia antes de ser abandonado en el lote baldío. Las pruebas forenses fueron esenciales para identificar a la menor y determinar el nivel de maltrato previo a su muerte, según NBC 10.

Las autoridades arrestaron a Darrian Randle bajo cargos de asesinato en primer y segundo grado y abuso infantil en primer grado con resultado de muerte, entre otros delitos. Cedrick Antoine Britten enfrenta cargos de complicidad en asesinato y omisión de reportar la muerte de un menor. Ambos casos quedaron registrados en los archivos judiciales de Delaware y Maryland; hasta la fecha, los registros no señalan la presencia de abogados defensores para los acusados, según Maryland State Police y registros judiciales revisados por PEOPLE.
Randle se encuentra bajo custodia en la Institución Correccional de Mujeres Baylor en New Castle, Delaware, con una fianza de un millón de dólares, mientras se tramita su extradición a Maryland para enfrentar los nuevos cargos en esa jurisdicción. Britten, por su parte, permanece bajo custodia de la Policía Estatal de Maryland a la espera de su comparecencia en el Tribunal de Distrito del Condado de Cecil, de acuerdo con NBC 10.
La investigación determinó que la denuncia presentada por Randle no se ajustaba a los hechos. Los recursos desplegados en la búsqueda de la menor respondieron a la Alerta Amber emitida con base en la denuncia de la madre, pero los primeros indicios recolectados —como la ausencia de señales de entrada forzada o testigos de la supuesta sustracción— llevaron a cuestionar la veracidad del secuestro, según Maryland State Police.
Las autoridades aseguraron que el testimonio de Randle fue inconsistente. Los hallazgos en la vivienda y las contradicciones detectadas durante los interrogatorios orientaron la investigación hacia la posible participación directa de la madre y su pareja en la desaparición y muerte de la menor.

El caso provocó conmoción y generó campañas comunitarias para apoyar el funeral de Nola Dinkins. Un familiar de la víctima inició una colecta en GoFundMe para cubrir gastos asociados.
Las autoridades mantienen abierta la investigación y solicitaron la colaboración de posibles testigos o personas con información relevante, que pueden comunicarse directamente con el cuartel noreste de la Policía Estatal de Maryland. Además, la línea nacional de ayuda contra el abuso infantil de Childhelp está disponible para reportes confidenciales en cualquier estado del país, según Maryland State Police.
La causa oficial de la muerte y el reporte final de la autopsia de Nola Dinkins permanecen en proceso, de acuerdo con fuentes policiales y forenses citadas por Maryland State Police. Los resultados son clave para definir los cargos formales y el curso del proceso judicial que se desarrolla contra Randle y Britten.
El caso seguirá sujeto a procedimientos judiciales en Maryland, en coordinación con los tribunales de Delaware. Las agencias involucradas emitieron declaraciones públicas señalando que el avance de la investigación dependerá de los exámenes médicos, testimonios y análisis de evidencia recolectada en las distintas etapas del caso, según Maryland State Police.