
El “zar de la frontera” Tom Homan advirtió sobre la presencia de nacionalistas iraníes y otros migrantes no contabilizados en Estados Unidos tras el ataque realizado por las fuerzas militares estadounidenses contra instalaciones nucleares de Irán el sábado por la noche.
Homan, quien participó en el programa de Fox News “Sunday Morning Futures” junto a la presentadora Maria Bartiromo, expuso lo que considera “la mayor vulnerabilidad” de seguridad nacional que enfrenta el país en el contexto actual de tensión en Oriente Medio.
Durante su intervención, enfatizó que la “frontera abierta” es la principal debilidad en materia de seguridad nacional. Según sus declaraciones, en los últimos cuatro años, la preocupación por este tema ha superado cualquier otro riesgo, incluso el tráfico de fentanilo o la trata de personas.

Homan detalló que, bajo la administración del expresidente Joe Biden, las cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) muestran que 1.272 nacionalistas iraníes han sido liberados dentro del país.
Estos datos contrastan con la política del gobierno actual durante el cual, según Homan, no se produjeron liberaciones de este tipo: “Comparando eso con la administración Trump, no hubo liberaciones, ¿verdad? Cero liberaciones. Y ahora mismo, gracias a su liderazgo, tenemos la frontera más segura que he visto, la más segura en la historia de esta nación".
En su opinión, la política de no liberar a extranjeros que cruzan la frontera sin ser detectados fue una de las grandes victorias de la administración anterior para proteger al país. Sin embargo, Homan contrastó esta situación con la actual, señalando que, bajo la presidencia de Biden, más de 10 millones de personas han cruzado la frontera sur.
De ese total, una cifra especialmente preocupante para el zar fronterizo corresponde a los llamados “fugitivos”: “Mi mayor preocupación desde el primer día, más allá del fentanilo, más allá del tráfico sexual de mujeres y niños, fueron los dos millones de ‘fugitivos’ conocidos: más de dos millones de personas cruzaron esa frontera. No sabemos quiénes son ni de dónde vinieron, porque escaparon, ya que la patrulla fronteriza está desbordada por la crisis humanitaria que creó Biden”.

Homan insistió en que la incapacidad de identificar y rastrear a estos individuos constituye la mayor vulnerabilidad de seguridad nacional que ha enfrentado Estados Unidos. El contexto de estas declaraciones se enmarca en la reciente escalada de tensiones en Oriente Medio.
El sábado por la noche, Estados Unidos coordinó ataques contra tres instalaciones nucleares iraníes. Esta acción militar ha tenido repercusiones inmediatas en la política de seguridad y en las recomendaciones de viaje para los ciudadanos estadounidenses en la región.
El Departamento de Estado de Estados Unidos incrementó el domingo los niveles de advertencia para quienes planean viajar a países de Oriente Medio, incluyendo Líbano, Turquía, Arabia Saudita y Jordania.
Las medidas adoptadas por el Departamento de Estado varían según el país. En el caso de Líbano, la situación se considera especialmente delicada, por lo que se ha ordenado la salida de los familiares y de todo el personal gubernamental no esencial. Esta decisión responde a la creciente inseguridad en el país tras los ataques estadounidenses. Para Turquía y Arabia Saudita, el nivel de alerta se ha elevado, aunque no se ha emitido una orden de evacuación. En Jordania, la alerta se mantiene en nivel dos, lo que implica que los estadounidenses deben extremar las precauciones durante su estancia.