*El cruce de Otamendi y Kane
Se jugaba el segundo tiempo entre Bayern Múnich y el Benfica por la tercera fecha del Grupo C del Mundial de Clubes, cuando se produjo el tenso cruce entre el defensor argentino Nicolás Otamendi y el delantero inglés Harry Kane.
Luego de un centro desde la derecha, el punta británico fue a buscar el cabezazo, pero no pudo conectar y cayó dentro del área. Ahí el zaguero de la selección argentina lo increpó y lo empujó, reclamándole una simulación para generar un penal. Lejos de intimidarse, Kane le respondió y debió intervenir el alemán Thomas Müller para calmar los ánimos. Otamendi le reclamó al árbitro Francois Letexier (Francia) por la actitud de su rival, pero el clima logró aplacarse.
Este martes se completó la actividad de la zona y con su triunfo por 1 a 0, el Benfica quedó primero y el Bayern Múnich se ubicó segundo. Ambos se clasificaron a los octavos de final y por ahora sus rivales son el Chelsea y el Flamengo, respectivamente, cuyo grupo se definirá este martes.
El conjunto portugués abrió el marcador a los 13 minutos con el tanto del noruego Andreas Schjelderup. Con la ventaja, el equipo de Ángel Di María controló las acciones ante un Bayern Múnich que presentó un equipo con algunas modificaciones respecto de los dos primeros cotejos, ya que su clasificación estaba asegurada luego de la fecha anterior, por el triunfo 2-1 ante Boca. El entrenador del elenco teutón, Vincent Kompany, dispuso nada menos que siete cambios: quedaron afuera Laimar, Tah, Kimmich, Goretzka, Olise, Coman y Harry Kane, y entraron Boey, Upamecano, Palhinha, Pablovic, Sané, Bischof y Thomas Müller. Sólo se mantuvieron Neuer, Stanišić, Guerreiro y Gnabry.
En el complemento del encuentro disputado en el America Stadium de Charlotte, los alemanes buscaron el empate, pero no pudieron conseguirlo. Se arrimaron al área rival y generaron peligro, como en la jugada que derivó en la reacción de Otamendi sobre Kane.
El contexto del partido en Charlotte añadió un elemento adicional de dificultad, ya que las altas temperaturas influyeron en el rendimiento físico de los jugadores. A pesar de las condiciones climáticas, Benfica mantuvo la concentración y supo gestionar la ventaja obtenida con el gol de Schjelderup. También mostró disciplina táctica y una defensa ordenada, lo que le permitió neutralizar los intentos de reacción del Bayern Múnich.
Fue un triunfo histórico del elenco lusitano ya que por primera vez luego de 14 partidos oficiales pudo ganarle al elenco bávaro. El éxito del equipo portugués decretó la eliminación de Boca Juniors del torneo. El Benfica terminó primero en el Grupo C con 7 puntos, contra 6 del Bayern Múnich.
El recorrido de Benfica en la fase de grupos comenzó con un empate ante Boca Juniors, en un partido que terminó 2-2. Este resultado dejó abierta la competencia en el grupo, ya que ambos equipos sumaron un punto y mantuvieron sus aspiraciones intactas. Posteriormente, el elenco lusitano enfrentó a los representantes de Nueva Zelanda, a quienes venció de manera contundente con un marcador de 6-0, una diferencia que no solo aportó tres puntos, sino que también mejoró significativamente la diferencia de goles del equipo portugués, que se quedó con el liderazgo del grupo.