
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos informó este martes la detención de once ciudadanos iraníes en situación irregular en el país, entre ellos un ex miembro de la Guardia Revolucionaria Islámica y un sujeto con presuntos vínculos con el grupo terrorista chií libanés Hezbollah.
Según el comunicado difundido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), los arrestos tuvieron lugar durante el pasado fin de semana en distintas ciudades del país y se alinean con “el compromiso de la secretaria de Seguridad, Kristi Noem, de mantener a los terroristas conocidos y presuntos fuera de las comunidades estadounidenses”.
Entre los detenidos, según informó el ICE, figuran “un individuo con vínculos admitidos con Hezbollah, un terrorista conocido o sospechoso, y un presunto ex francotirador del Ejército iraní”, que se sumaron al arresto también de una ciudadana estadounidense, Linet Vartaniann, acusada de haber brindado refugio a uno de los detenidos, Mehrzad Asadi Eidivand, y de haber lanzado amenazas de violencia contra agentes del organismo.
Según el comunicado publicado en la web oficial del departamento, Vartaniann advirtió que dispararía “a los funcionarios del ICE en la cabeza” si intentaban ingresar en la vivienda para detener a Eidivand.
“Bajo la Secretaria Noem, el Departamento de Seguridad Nacional ha trabajado arduamente para identificar y arrestar a terroristas y extremistas violentos, conocidos o presuntos, que ingresaron ilegalmente a este país, ya sea a través de los fraudulentos programas de libertad condicional de Biden o de otras maneras”, sostuvo la subsecretaria del DHS, Tricia McLaughlin.
“Hemos estado diciendo que estamos sacando a los peores de entre los peores, y lo estamos haciendo. No esperamos a que se produzca una operación militar para ejecutarla; cumplimos proactivamente el mandato del presidente Trump de proteger la patria”, insistió.

Uno de los arrestos destacados ocurrió el 22 de junio, cuando agentes del ICE en Atlanta detuvieron a Ribvar Karimi, a quien identificaron como ex francotirador del Ejército iraní, entre 2018 y 2021. Según las autoridades, Karimi tenía en su poder una tarjeta de identificación del Ejército de la República Islámica de Irán.
Se presume que llegó a Estados Unidos en octubre de 2024, bajo la administración de Joe Biden, con una visa tipo K-1 para prometidos extranjeros de ciudadanos estadounidenses pero nunca regularizó su estatus migratorio, por lo que, actualmente, está a la espera de su proceso de deportación.
Ese mismo día, en St. Paul, Minnesota, los oficiales arrestaron a Mehran Makari Saheli, de 56 años, condenado por posesión de arma de fuego en Minneapolis y sentenciado a 15 meses de prisión.
Saheli, ex miembro del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, contaba con vínculos admitidos a Hezbollah y, de hecho, un juez de inmigración ya había ordenado su deportación en junio de 2022, pero permanecía en Estados Unidos.
Las redadas se dieron en el marco de la campaña contra la inmigración irregular que Donald Trump impulsó al inicio de su segundo gobierno, por la que miles de personas ya han sido expulsadas del país y que, a su vez, han desatado importantes protestas en ciudades de todo el territorio.
(Con información de Europa Press)