MIAMI. - Un expolicía de Miami de 62 años, quien laboró como guardia de seguridad para Miami Heat, se declaró culpable el martes por el robo y la venta de camisetas y artículos de colección del equipo valorados en millones de dólares.
Marcos Tomás Pérez cambió su declaración a "culpable" en una audiencia en la corte federal del Distrito Sur de Florida, tras ser acusado de aprovechar su acceso para sustraer los artículos entre 2016 y 2025 y comercializarlos ilegalmente.
Esquema millonario y camiseta histórica
Según la Fiscalía Distrito Sur de Florida, durante su tiempo como empleado de Miami Heat y posteriormente de la NBA, Pérez tuvo acceso a una sala de equipamiento segura en el Kaseya Center.
Desde allí, robó más de 400 camisetas utilizadas en juegos y otros objetos que la organización planeaba exhibir en un futuro museo, según documentos del caso.
Las autoridades federales informaron que, a lo largo de tres años, Pérez vendió más de 100 de los artículos robados, con lo que obtuvo ganancias de aproximadamente 1.9 millones de dólares.
Entre los objetos sustraídos destaca una camiseta que LeBron James usó durante las Finales de la NBA. Pérez la vendió por unos 100.000 dólares; sin embargo, la misma prenda alcanzó un valor de 3.7 millones de dólares en una subasta posterior de Sotheby's, lo que evidencia la magnitud de las pérdidas para la franquicia.
Modus operandi
Documentos judiciales revelan que Pérez utilizaba un método sistemático para cometer los robos. Solía pedir la llave de la sala de equipamiento a un compañero con la excusa de necesitar el baño, dejaba la puerta entreabierta y regresaba más tarde para tomar los artículos.
Para la venta de los objetos de colección, recurrió a un intermediario con quien dividía las ganancias. Las transacciones se realizaban a través de plataformas en línea como eBay e Instagram para promocionar y negociar los artículos, de acuerdo con las pesquisas.
Justicia y un futuro incierto
La investigación culminó en abril con una orden de allanamiento en la residencia de Pérez, donde las autoridades recuperaron cerca de 300 camisetas adicionales y otros artículos.
Miami Heat confirmó que todos los objetos encontrados habían sido robados de sus instalaciones.
Pérez, un veterano con 25 años de servicio en el Departamento de Policía de la Ciudad de Miami, enfrenta ahora una posible sentencia máxima de 10 años de prisión, tres años de libertad supervisada y una multa de hasta 250.000 dólares.
Su abogado defensor, Robert Buschel, manifestó que su cliente "acepta la responsabilidad por su comportamiento" y espera que el juez considere su "historial como una buena persona" y su "ejemplar servicio como oficial de policía".
La sentencia está programada para el próximo 31 de octubre.