“Somos un país de contradicciones, de luces y sombras, y esta película celebra eso. Es una pintura de quiénes somos, con nuestras virtudes y nuestras miserias”, expresó Guillermo Francella en diálogo con Infobae durante la filmación de la película, al describir el espíritu de Homo Argentum, la nueva producción dirigida por Mariano Cohn y Gastón Duprat que finalemtne ya llegó a los cines.
El film, que se presenta como una antología de relatos breves, propone una mirada irónica y reflexiva sobre la sociedad argentina contemporánea, utilizando la comedia como vehículo para explorar sus contradicciones más profundas.

La propuesta de Homo Argentum se distingue por su estructura: dieciséis historias independientes, cada una con una duración de entre uno y doce minutos, en las que Francella asume papeles radicalmente distintos. Esta multiplicidad de personajes, que abarca desde un director de cine internacional hasta un vendedor callejero de dólares en la calle Florida, pasando por un padre de familia de clase media y un multimillonario, permite al actor desplegar un rango interpretativo inusual en el cine argentino reciente. El propio Francella reconoció ante Infobae el desafío que implicó este trabajo: “No fue fácil componer tantos personajes, pero gracias a Dios se hacía cronológicamente. Se elegía la viñeta para tal locación y se estaban los tres días ahí. Se empezaba y terminaba cada episodio”.
La génesis del proyecto remite a una conversación entre Francella y los directores durante el rodaje de la serie El Encargado. El actor propuso revisitar Los monstruos (1963), la comedia neorrealista italiana de Dino Risi que marcó a toda una generación. “Me marcó mucho la película. Era de episodios con mucho humor. Hablaban del gen italiano, que se los veía de cuerpo y alma, con humor, con crítica social, con reflexión. Les dije: ‘Habría que hacer eso con el gen nuestro, el argentino’”, relató Francella a la agencia EFE. De esa idea surgió un proceso de escritura que se extendió durante casi dos años y que involucró a Andrés Duprat, Mariano Cohn, Gastón Duprat y un equipo de guionistas. De las cuarenta historias originales, solo dieciséis llegaron a la pantalla, seleccionadas por su capacidad de ofrecer un retrato antagónico y plural de la sociedad argentina.

El rodaje, que se extendió durante nueve semanas en locaciones de Argentina e Italia, dotó a cada viñeta de una ambientación particular y diversa, reforzando el homenaje al cine europeo que impregna la obra. La producción, liderada por Pampa Films y Gloriamundi, junto a socios internacionales como Rhino Film, Dea Film y Blue Film, apostó por una calidad técnica y artística que, según los directores, solo puede apreciarse plenamente en la sala de cine. “Es una película diseñada para las salas de cine, ya que se trata de una producción de gran presupuesto y de gran calidad técnica y artística. Por eso elegimos ir a los cines, queremos que la gente la pueda apreciar en toda su dimensión en las salas”, explicaron Cohn y Duprat en declaraciones recogidas por Infobae.
El guion, firmado por Andrés Duprat, Mariano Cohn, Gastón Duprat y con la colaboración de Horacio Convertini, Leonardo D´Espósito, Juan José Becerra y Mario Mactas, construye un mosaico de relatos que, aunque autónomos, se entrelazan para ofrecer una reflexión colectiva sobre la sociedad argentina. Cada segmento aborda dilemas morales, situaciones cotidianas al borde del absurdo y tensiones reconocibles de la vida urbana, siempre desde una perspectiva humorística y con una marcada crítica social. “En la película, la comedia y las risas esconden por detrás las contradicciones y dilemas de la vida urbana”, sintetizaron los directores.

El enfoque de Homo Argentum evita emitir juicios o conclusiones definitivas sobre “lo argentino”. En palabras de Duprat, “no intenta sacar un dictamen o una conclusión de cómo son los argentinos”. Cohn complementó: “El formato antológico de la película nos permite una reflexión colectiva sobre la sociedad argentina contemporánea”. El resultado es una cartografía social reconocible, contradictoria y, en ocasiones, incómoda, en la que cada espectador puede verse reflejado. “Fuimos tamizando y quedaron estas dieciséis, bien antagónicas. Se ve reflejado cómo somos los argentinos: solidarios, generosos, familieros, chantas. Creo que va a haber mucha identificación”, sostuvo Francella.
El trabajo actoral de Francella fue objeto de elogio por parte de los directores. Cohn afirmó: “Es uno de los mejores actores de Argentina, para mí el mejor actor del mundo para encarar este tipo de papeles”. La transformación física y psicológica que exige cada personaje requirió un esfuerzo de caracterización extremo, con horas de maquillaje y una adaptación total a la lógica de cada relato. El propio actor destacó el respaldo del equipo y la solidez del guion, que le permitió transitar registros que van desde lo sarcástico hasta lo emotivo, sin perder la conexión con el público.

La película, con una duración de 110 minutos, rinde homenaje a la época dorada del cine italiano, evocando clásicos como Los Monstruos, Un burgués pequeño pequeño y Viva Italia, pero con el sello distintivo de la filmografía de Duprat y Cohn. El formato de viñetas autónomas permite que cada historia aborde diferentes aspectos de la vida contemporánea, siempre desde una perspectiva humorística y con una marcada crítica social.
“Estas minipelículas están muy trabajadas, tienen muchos dobleces. Tienen una reflexión sobre nosotros mismos”, detalló Duprat. Algunas historias se inclinan hacia el sarcasmo y el humor, mientras que otras exploran la emotividad y la hondura.

El elenco, encabezado por Guillermo Francella, cuenta con la participación de Eva de Dominici, Milo J, Migue Granados, Clara Kovacic, Vanesa González, Juan Luppi, Gastón Sofriti, Dalma Maradona y Guillermo Arengo, entre otros.