Kanye West vuelve a los escenarios y decepciona a miles de fans en Shanghái

Por si la lista de escándalos de Kanye West no fuera lo suficientemente extensa, ahora puede sumar otro episodio más: la furia de sus fans en China tras un concierto “desastroso” que dejó más preguntas que canciones y que demuestra que hasta sus seguidores más leales están perdiendo la paciencia.

Después de más de un año fuera de los escenarios, el rapero estadounidense eligió el estadio de Shanghái como lugar para su gran “regreso”. Y lo que pintaba para ser una noche histórica para los 70 mil asistentes, rápidamente se convirtió en una experiencia incómoda, caótica y, según muchos, completamente irrespetuosa.

De acuerdo con el portal NME y medios locales como The Global Times, Kanye apareció en escena con más de 40 minutos de retraso, lo que muchos consideraron como una “burla” ya que la puntualidad es especialmente importante en la cultura china.

Pero el retraso fue apenas el primer trago amargo. El escenario parecía sacado de un ensayo general en vez de una gira internacional: iluminación mínima, cero pantallas, nada de efectos visuales y Kanye solo en medio de una enorme pista ovalada. Para rematar, debido a la lluvia, la calidad del sonido en el recinto al aire libre se vio afectada.

En redes sociales varios asistentes reportaron que West tuvo problemas técnicos con el DJ que le obligaron a reiniciar canciones, saltarse versos y perder el ritmo en varias ocasiones. Por momentos, parecía más una prueba de sonido que un show con entradas de hasta $400 dólares.

Y por si todo esto fuera poco, el comportamiento errático del rapero terminó de enterrar la noche. Kanye entraba y salía del escenario sin explicación, y en un giro final que nadie entendió, desapareció del show mucho antes de terminar su set, dejando a la multitud confundida, empapada y furiosa.

Como era de esperarse, las redes sociales chinas ardieron. El concierto se volvió tendencia con comentarios como: “Nunca vi un concierto tan mal organizado” o “Esto fue una falta de respeto total”. Algunos incluso empezaron a gritar por reembolsos en pleno estadio.

Con esto, Kanye West suma otro capítulo a su interminable lista de polémicas. Entre sus explosiones antisemitas, sus discursos desordenados y su eterna pelea con todo el mundo, muchos pensarían que ya no puede sorprender, pero parece que siempre hay un nivel más abajo al que puede llegar el exesposo de Kim Kardashian.

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