
La actriz y modelo estadounidense Denise Richards, de 54 años, está atravesando una de las etapas más difíciles de su vida personal. Tras seis años de matrimonio con el actor y terapeuta holístico Aaron Phypers, la relación llegó a su fin en julio de 2025 con una sorpresiva solicitud de divorcio por parte de él.
Este jueves, Richards respondió con una grave acusación de violencia doméstica que sacudió a la opinión pública y reconfiguró la imagen de la pareja que alguna vez pareció inseparable.
Denise Richards saltó a la fama en los años noventa con películas como Invasión (1997), Criaturas salvajes (1998) y su recordado papel como chica Bond en 007: el mundo no basta (1999), donde interpretó a Christmas Jones.
A lo largo de su carrera, también participó en cintas como Scary Movie 3, Love Actually, Madea’s Witness Protection, y en series como Belleza y poder, Twisted y Blue Mountain State.

Aaron Phypers, por su parte, es un actor ocasional y especialista en medicina alternativa. Fundó un centro de “sanación vibracional” en Malibu llamado Quantum 360, donde ofrecía terapias relacionadas con “reparación de ADN” y “medicina de frecuencias”.
Fue precisamente en ese lugar donde conoció a Richards, quien acudió como paciente en 2017. Ella ya se había divorciado del actor Charlie Sheen en 2006, y llevaba varios años soltera.
Los detalles de ese flechazo los contó la propia actriz en The Real Housewives of Beverly Hills.
“Lo conocí en su centro haciendo reparación de ADN, antienvejecimiento y esas cosas. Luego tuvimos sexo en una de sus salas. Hemos sido inseparables desde entonces”, dijo con franqueza.

En ese momento, Phypers aún estaba legalmente casado con la actriz Nicollette Sheridan, aunque su proceso de divorcio ya estaba en marcha.
Finalmente, esa separación se oficializó en agosto de 2018, y apenas unos días después, Richards y Phypers contrajeron matrimonio.
La boda se celebró el 8 de septiembre de 2018 en Malibu, y fue organizada en menos de 48 horas por la reconocida wedding planner, Mindy Weiss.
Richards, que optó por romper la tradición usando una falda de tul desmontable en lugar de un vestido tradicional, explicó a PEOPLE: “[Aaron] quería casarse el 8 de septiembre porque el número ocho simboliza el infinito”.
El compromiso de Phypers con la familia de Richards fue inmediato.
Durante una entrevista en The Talk, la actriz compartió con entusiasmo que su esposo había iniciado el proceso legal para adoptar a su hija menor, Eloise, a quien Richards había adoptado en 2011. “Es increíble como padre. Es maravilloso con mis hijas”, afirmó.
El vínculo con Eloise creció al punto que, en 2020, Richards contó que la niña dijo por primera vez la palabra “papá”, en referencia a Aaron.
“Fue el mejor regalo del Día del Padre”, celebró la estrella de Scary Movie en sus redes sociales.
Pese a las muestras públicas de afecto, la relación enfrentó momentos controvertidos.
En 2020, en el reality The Real Housewives of Beverly Hills, Brandi Glanville acusó a Richards de haber tenido una relación sexual con ella en abril de 2019 y aseguró que el matrimonio con Phypers era abierto.
Richards negó categóricamente las declaraciones y, según Us Weekly, fuentes cercanas a la pareja aseguraron que “no les importaba esa clase de rumores”, ya que su relación era “sólida”.

Otra faceta poco conocida del vínculo fue su colaboración en el contenido para OnlyFans.
En 2022, Richards se unió a la plataforma y reveló que su esposo era una pieza clave en la producción de sus fotos y videos.
“Aaron es quien captura mucho de mi contenido. Sabe lo que les gusta a los hombres. Le muestro cosas y le pregunto ‘¿Qué opinas?’”, dijo la actriz en Jeff Lewis Live de SiriusXM.
Otro insider respaldó esa versión en diálogo con Us Weekly y señaló que al actor “le encanta lo segura y empoderada que es”.
“Tienen una relación muy sana y segura, una vida amorosa al rojo vivo y él se siente más atraído por ella que nunca”, afirmó la fuente.

En paralelo a su vida marital, Phypers enfrentó problemas legales relacionados con su clínica Quantum 360.
En noviembre de 2024, PEOPLE reportó que fue demandado por Rupert Perry, cuyo esposa fallecida, Elina Katsioula-Beall, recibió un costoso tratamiento de células madre que supuestamente tendría una “tasa de éxito del 98%”.
La terapia fracasó y los tumores de la paciente aumentaron un 25%. El demandante alegó que Phypers prometió devolver la mitad del dinero si no había resultados, pero nunca cumplió.
El 7 de julio de 2025, el esposo de Denise Richards presentó formalmente la solicitud de divorcio y citó “diferencias irreconciliables” como la causa de la separación.
En sus documentos, anotó que la fecha de ruptura fue el 4 de julio. Según los papeles judiciales obtenidos por PEOPLE, pidió manutención conyugal y reclamó como propiedad separada herramientas, una motocicleta y un auto deportivo.

Phypers alegó que tuvo que cerrar su negocio el año anterior (probablemente debido a la demanda que enfrenta), y que no había tenido ingresos desde entonces.
El documento indicaba también que la pareja no compartía hijos menores, por lo que no hay certeza de si Phypers llegó a finalizar los presuntos trámites de adopción de Eloise.
La actriz no había dado declaraciones ni tampoco se supo más sobre el final de su matrimonio hasta este jueves.
El 16 de julio, Denise Richards solicitó una orden de restricción por violencia doméstica, acompañada de un testimonio estremecedor.
Según documentos citados por PEOPLE, Richards alegó que Phypers la “estrangulaba con violencia, me apretaba la cabeza con ambas manos, me golpeaba violentamente en la cara, me empujaba contra el toallero del baño y me amenazaba con matarme”.

Agregó además que su exesposo habría colocado dispositivos de grabación en sus habitaciones para espiarla y que accedía sin permiso a su computadora y teléfono personal.
“Aaron regularmente amenazaba con ‘romperme la mandíbula’, y luego lloraba, me suplicaba que no lo dejara y prometía buscar ayuda —promesas que nunca cumplió”, declaró.
“Hasta ahora, había tenido miedo de denunciar a Aaron a la policía o de solicitar una orden de alejamiento porque me ha amenazado repetidamente con matarme y suicidarse si lo reportaba a las autoridades”, escribió.
Richards también solicitó que Phypers asuma los gastos legales derivados del proceso y que asista a un programa de rehabilitación de 52 semanas para agresores.
Horas después de que se hiciera pública la denuncia de la actriz, se le concedió la orden de restricción temporal.
Us Weekly logró contactar a Phypers, quien se defendió de las acusaciones: “No es cierto. Inventado. Tengo las pruebas reales”.
Todo indica que se avecina una fuerte confrontación en el proceso legal de disolución del matrimonio que duró casi 7 años.