Liberaron al futbolista de San Martín de San Juan acusado de amenazas y resistencia a la autoridad

Matías Orihuela, el jugador del club San Martín de San Juan que había sido detenido tras protagonizar un violento altercado con la Policía de Mendoza en una ruta de la zona de Potrerillos, fue liberado bajo fianza en las últimas horas. Está imputado por los delitos de amenazas y resistencia a la autoridad.

Durante la audiencia de este jueves, la jueza del Juzgado Penal N°2 de Mendoza, Amalia Yornet, resolvió concederle la libertad bajo fianza y dispuso una serie de restricciones como condición.

Orihuela deberá abonar una suma de $10.000.000, entregar su pasaporte y presentarse una vez por semana en sede judicial para cumplir con el trámite de firma. Además, tiene prohibida la salida del país mientras avanza la investigación.

El fiscal Juan Carlos Alessandra intervino en representación de la Fiscalía, en reemplazo de Gustavo Stroppiana, responsable de la causa. En su exposición, el fiscal remarcó la gravedad de los hechos, que incluyeron agresiones y lesiones hacia un agente de seguridad, sumadas a otras infracciones previas, como el cruce de doble línea amarilla, poniendo en riesgo la vida de terceros.

Orihuela firmó su contrato con San Martín de San Juan días atrás

En la audiencia, que se realizó en el Fuero Penal Colegio (Polo Judicial Penal), el fiscal Alessandra también se refirió a la reacción violenta del futbolista y a la posterior agresión “(con lesiones constatadas) al agente que se encontraba prestando funciones”, según un comunicado de la Unidad Fiscal Correccional del Ministerio Público Fiscal de Mendoza.

Así, teniendo en cuenta el grado de violencia desplegado, informaron que la Fiscalía consideró que una condena de ejecución condicional no se ajustaba a la regla, sino que lo indicado era una pena de cumplimiento efectivo.

A lo que se sumaron “los indicadores relativos al riesgo procesal del imputado”, detallaron. En ese contexto, en su exposición el fiscal detalló que el imputado, si bien juega en la provincia de San Juan, está domiciliado en Buenos Aires y hay “razones por las cuales no sería óptimo considerar el factor del arraigo laboral ni domiciliario”. Por ello, “estimó la existencia de un potencial riesgo de fuga”.

En tanto, se incorporó que “existió entorpecimiento probatorio debido a que había antecedentes sobre su accionar para suponer la posibilidad de intimidación hacia el resto de los testigos”.

El altercado con los policías

Noticia en desarrollo