
La familia de un niño de 4 años en Oregón inició una demanda civil por 22 millones de dólares contra el dentista Dr. Dustin M. Davis, el anestesiólogo Lane D. Robinson y la clínica Sunnyside Dentistry for Children, luego de que el menor sufriera un daño cerebral grave durante un procedimiento dental, según NBC News. La denuncia, presentada el 30 de julio ante la Corte del condado de Multnomah, sostiene que el menor, identificado en documentos como M.L., sufrió un paro cardíaco tras recibir anestesia general, episodio que le provocó lesiones cerebrales irreversibles y le impide realizar actividades básicas de forma independiente.
De acuerdo con el texto de la demanda, el procedimiento, realizado el 24 de julio, tenía el fin de tratar varias caries. Se administró anestesia general con sevofluorano bajo la dirección del doctor Davis y con el apoyo del anestesiólogo Robinson, aun cuando uno de los padres manifestó reservas sobre el uso de anestesia general para la intervención. Pocos minutos después del inicio del procedimiento en las instalaciones de Sunnyside Dentistry for Children, el menor experimentó un paro cardíaco y fue reanimado utilizando compresiones en el pecho y dosis de epinefrina, según relató el abogado familiar, Kirc Emerson.
Las consecuencias del incidente han sido profundas para la familia. Tras permanecer seis semanas hospitalizado, el niño regresó al hogar, pero según el abogado, “no ha recuperado por completo sus habilidades” y “su infancia ha cambiado materialmente a partir de esto”, describió Emerson en declaraciones recogidas por NBC News.
En el relato aportado en la denuncia, la familia señala que la primera visita de M.L. a Sunnyside Dentistry for Children tuvo lugar varios meses antes, cuando contaba todavía con 3 años. En esa oportunidad, el doctor Davis intentó realizar el procedimiento con óxido nitroso, conocido como gas de la risa, pero finalmente sugirió reprogramar la intervención para aplicar anestesia general. Según Emerson, no se entregó ninguna explicación detallada a los padres sobre el motivo por el cual se optó por este cambio de anestesia.
El día del evento, el procedimiento inició a las 5:51 a.m. y, a las 6:12 a.m., según el documento legal, el menor ya no presentaba pulso. El equipo respondió con maniobras de reanimación y medicamentos hasta estabilizar a M.L., que fue trasladado posteriormente a un hospital.
La denuncia sostiene que “los demandados no supervisaron de forma adecuada los signos vitales del menor ni respondieron a tiempo ante las señales de estrés, permitiendo que su corazón se detuviera”, lo que ocasionó el daño cerebral como consecuencia directa de la falta de oxígeno.

El documento legal enfatiza que la administración de anestesia general se efectuó pese a que uno de los padres expresó sus dudas. La familia argumenta que esta decisión agravó la responsabilidad de los involucrados. La demanda, presentada ante la Corte del condado de Multnomah, involucra tanto al dentista Davis como al anestesiólogo Robinson y a la clínica Sunnyside Dentistry for Children.
Según la denuncia, M.L. ha experimentado una regresión considerable en su desarrollo. “Ha vuelto al estado de un infante y ha tenido que reaprender todas las funciones básicas”, dice el texto legal, citando que el menor ya no puede caminar, hablar, escribir, vestirse solo ni ir al baño sin ayuda.
El anestesiólogo Robinson, contactado por NBC News vía telefónica, evitó emitir comentarios directos y señaló que prefería referir cualquier declaración a su abogado. El doctor Davis, así como la clínica, no respondieron a las solicitudes de información presentadas por el medio.
Según registros de la Junta de Odontología de Oregón consultados por NBC News, Davis no cuenta con antecedentes de mala praxis. Trabaja en Sunnyside Dentistry for Children desde 2021 y antes ejerció cinco años en odontología pediátrica en Seattle. Davis obtuvo su doctorado en cirugía dental en la Virginia Commonwealth University y cursó su residencia, así como una maestría en ciencias orales, en la Universidad de Illinois en Chicago.

Desde el incidente, la vida de M.L. ha cambiado radicalmente, obligado a depender completamente de otras personas para realizar tareas básicas. Emerson afirmó que, hasta la fecha, ninguna de las partes demandadas ha respondido formalmente a la denuncia ni ha ofrecido explicaciones adicionales a la familia.
La demanda permanece en proceso ante la Corte del condado de Multnomah, mientras la familia busca justicia y atención continua para M.L.