Chuck Mangione, compositor, trompetista y figura clave del jazz fusión en Estados Unidos, murió a los 84 años pacíficamente mientras dormía el pasado 22 de julio en su casa en Rochester, Nueva York, según confirmó su familia en un comunicado difundido este miércoles 24 por el Democrat and Chronicle, medio local de la red USA Today.
“El amor de Chuck por la música se caracterizó por su energía incansable, entusiasmo contagioso y una alegría pura que irradiaba desde el escenario. Su aprecio por los fans era auténtico, como lo demostraba quedándose después de cada concierto a firmar autógrafos el tiempo que fuera necesario”, señaló el comunicado.
Mangione construyó una carrera prolífica que abarcó más de seis décadas. Publicó 30 álbumes y fue galardonado con dos premios Grammy: uno en 1977 por “Bellavia” en la categoría de mejor composición instrumental, y otro en 1979 por The Children of Sanchez, banda sonora de la película homónima que también recibió un Globo de Oro.
Su mayor éxito comercial llegó con el álbum Feels So Good (1977), cuyo sencillo homónimo alcanzó el puesto número 4 en la lista Billboard Hot 100. El disco llegó al número 2 en ventas en 1978, superado solo por la banda sonora de Fiebre de sábado por la noche.
Charles Frank Mangione nació y creció en Rochester. Comenzó a tomar clases de música a los 8 años y pronto formó un dúo de jazz con su hermano pianista, Gap Mangione. Ambos fueron fuertemente influenciados por el gran Dizzy Gillespie, amigo cercano de su familia.
Gillespie quedó tan impresionado por el joven Chuck que llegó a regalarle una de sus icónicas trompetas de campana curva, gesto que marcó profundamente la carrera del músico.
Tras estudiar en la prestigiosa Eastman School of Music, Mangione se graduó en 1963 con una licenciatura en educación musical, y más tarde regresaría a la misma institución como docente y director de su ensamble de jazz.

Cabe destacar que la trayectoria de Chuck Mangione logró lo que pocos músicos de jazz han conseguido: una conexión masiva con el público general. Su estilo accesible, melódico y emocionalmente directo lo convirtió en una figura reconocible incluso fuera del circuito especializado.
En 1980, compuso “Give It All You Got”, tema oficial de los Juegos Olímpicos de Invierno en Lake Placid, y lo interpretó en la ceremonia de clausura ante cientos de millones de televidentes.
Su influencia trascendió incluso a la televisión. En la serie animada Los reyes de la colina, “Feels So Good” se convirtió en un recurso cómico recurrente, y el propio Mangione prestó su voz en varios episodios, interpretándose a sí mismo.
Chuck Mangione no solo fue un músico excepcional, sino también un promotor del talento joven. A lo largo de su carrera, invitó a bandas escolares a acompañarlo en el escenario como su orquesta.

Incluso, el artista organizó conciertos infantiles donde los niños podían subir a tocar junto a él, y demostró siempre un compromiso con formar futuras generaciones de músicos.
Ese legado quedó registrado incluso en vida. En 2009, donó parte de su archivo personal al Museo Nacional de Historia Americana del Smithsonian, incluyendo partituras, discos, fotografías, su característico sombrero de fieltro marrón y una celda de animación de King of the Hill.