
La hija de Alberto Cajamarca, actor y concejal alterno, fue secuestrada junto a dos personas al salir de su trabajo en el sector Kennedy Norte, en el norte de Guayaquil. El hecho ocurrió alrededor de las 17:00 de ayer, cuando desconocidos interceptaron a las víctimas usando dos taxis. Tres horas después, un operativo policial encabezado por agentes de la Unidad Antisecuestros y Extorsión (Unase) permitió rescatarla ilesa y detuvo a tres sospechosos, lo que renovó las alertas sobre los riesgos delictivos en la ciudad.
De acuerdo con agentes policiales citados por el diario local Expreso, los responsables controlaron a las víctimas antes de llevarlas a un terreno remoto cercano a la zona Fincas Delia, en las afueras de Durán. Ese sitio, sin servicios básicos ni vías asfaltadas, fue elegido para mantener a los secuestrados bajo vigilancia mientras definían su siguiente movimiento.
Los delincuentes buscaron obtener dinero inmediato al obligar a las víctimas a hacer transferencias bancarias. El plan, según consignó la agencia EFE, era retenerlas el tiempo necesario para exigir un rescate mayor a las familias tras confirmar la identidad de cada persona implicada.
Los responsables se identificaron como miembros de los grupos “Chone Killers” y “Latin Kings”, calificados como actores principales en el auge de secuestros y extorsión en la Zona 8, región que engloba Guayaquil, Durán y Samborondón. Estas organizaciones emplean intimidación verbal y referencias directas a su estructura criminal para atemorizar y presionar el pago, indicó Expreso.
El rescate se organizó en menos de tres horas. Tras la denuncia y el rastreo en tiempo real de señales, agentes de Unase y la Policía Nacional establecieron un cerco en Fincas Delia. Lograron ubicar a las víctimas en dos vehículos sospechosos junto a los presuntos secuestradores.
Durante el procedimiento, los sujetos intentaron escapar, lo que desató una persecución y disparos por parte de los acusados. La respuesta policial fue rápida y, aunque se recuperaron municiones, nadie resultó herido. Se incautaron teléfonos móviles y comprobantes de transferencias bancarias forzadas, sustentando la hipótesis de extorsión y robo.
La policía identificó entre los detenidos a Jiménez Vélez Diofre Ezequiel, Mora Correa Carlos Nahim y Mora Correa Jonathan Alberto. Los dos primeros tenían antecedentes por robo, extorsión y estafa, mientras que el tercero carecía de antecedentes legales previos.

Tras la liberación, los rescatados recibieron atención médica para descartar lesiones. Se encontraban en estado de conmoción, tal como anticipan los protocolos en situaciones de alta violencia y privación de libertad. El acompañamiento psicológico y el apoyo familiar fueron activados rápidamente, dada la naturaleza traumática del suceso.
La reacción de Alberto Cajamarca y la difusión del caso en redes sociales fueron inmediatas. El actor expresó su angustia: “Secuestraron a mi hija en Durán. Hay que vivirlo para sentirlo”, escribió en su cuenta de X.
El secuestro forma parte de una preocupante escalada. Entre enero y julio de 2025, cifras de la Fiscalía registraron 2.114 raptos en el país, de los cuales 811 sucedieron en Guayaquil, el 38% del total nacional, consolidando a la ciudad como el epicentro de este delito.
Las autoridades asocian estos crímenes con la lucha entre bandas por el control de territorios y rutas ilícitas, lo que ha motivado el endurecimiento de la seguridad y la declaración de “conflicto armado interno” desde 2024.
Según EFE, el Estado ecuatoriano atribuye la concentración de violencia y secuestros en la Zona 8 a la fragmentación de estructuras criminales, que expanden sus actividades más allá del narcotráfico y profundizan en delitos como la extorsión y las privaciones ilegales de la libertad.