Deterioro del sistema de radares de Venezuela propicia aumento del tráfico de cocaína al exterior

hace 23 horas 5

“Lo que hemos visto durante ese tiempo es un incremento en el trasiego de cocaína saliendo de Venezuela, y lo sabemos por los cientos de aviones que han ingresado y entrado al espacio aéreo venezolano”, afirma Romero al comentar el más reciente informe del Instituto acerca del estado de los equipos de radares venezolanos.

Según señala, más de 2,000 aviones con droga, con la protección del Cartel de los Soles [al que se le atribuye el liderazgo de altos mandos del chavismo, como Diosdado Cabello y Nicolás Maduro], han atravesado el espacio aéreo desde 2012 sin ser “neutralizados” por organismos de seguridad, y ello le generaría al régimen miles de millones de dólares con “complicidad trasnacional”, lo cual pone en serio riesgo la seguridad del hemisferio occidental.

Sin defensa

“Venezuela sigue siendo una amenaza para la estabilidad porque estas ganancias producto del tráfico las utiliza para la sobrevivencia del propio régimen”.

Romero añade que cualquier incautación de cargamento por alguna impertinencia puede salirle caro a los propios funcionarios militares del régimen.

“EEUU incautó 8,3 toneladas de cocaína que salió de Venezuela, en menos de 30 días en mayo, en el Caribe. Y de repente se cayó un avión”, dice en referencia a la aeronave ejecutiva Citation C-500, matrícula YV3217, que desapareció el 6 de junio tras despegar del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar con destino a la isla de Margarita, según señala el informe.

La aeronave transportaba a cinco personas, tres de ellas pasajeros, cuya identidad no ha sido revelada oficialmente, pero Romero indica que entre ellos se encontraba la esposa y la hija de un alto oficial del Centro de Operaciones de Defensa Aérea Integral (CODAI).

El Miami Strategic Intelligence Institute, fundado en enero de 2025, se dedica a proporcionar inteligencia estratégica a gobiernos, empresas e instituciones.

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Un escuadrón de aeronaves K8 de fabricación china, pertenecientes a la Fuerza Aérea Venezolana, sobrevuela un desfile militar para celebrar el 211 aniversario de la Independencia de Venezuela en Caracas, el 5 de julio de 2022.

Un escuadrón de aeronaves K8 de fabricación china, pertenecientes a la Fuerza Aérea Venezolana, sobrevuela un desfile militar para celebrar el 211 aniversario de la Independencia de Venezuela en Caracas, el 5 de julio de 2022.

Foto: Federico PARRA / AFP

Sistema en el suelo

Romero, experto en el área, reitera el diagnóstico del informe: más del 60% de los radares del sistema de defensa están “fuera de funcionamiento” y gran parte de la aviación de combate se encuentra “inactiva o limitada a funciones mínimas en dos de 10”.

“Lo que existe hoy es un aparato fragmentado, corroído por intereses criminales y operando con objetivos políticos”, señala basado en el informe documentado con datos y testimonios calificados.

Los radares tipo JYL-1 y JY-11B, esenciales para la vigilancia del espacio aéreo, están mayoritariamente inactivos por falta de repuestos y solo sobreviven pocos aviones SU-30MK2 y F-16, mientras que los entrenadores K-8W Karakorum no tienen radar aire-aire y se usan únicamente con fines simbólicos en operativos antidrogas.

“Esos sistemas se degradan sin inversión ni mantenimiento, todos tienen el mismo problema, y una de las tarjetas para arreglar cualquiera de las funciones de esos radares puede costar 120,000 dólares o más; y una repotenciación después de cinco años puede calcularse en 2 o 5 millones de dólares, pero en Venezuela, en vez de buscar a los técnicos que los colocaron, pueden costar más y los repuestos nunca llegan”, indica.

En la supuesta “neutralización” de aviones empleados para la salida de droga y que Romero cuestiona, participarían operadores de los radares, controladores aéreos, y los organismos militares ZODI, REDI y CODAI.

Cartel de los Soles

El especialista en inteligencia estratégica destaca las cuantiosas sumas de dinero ilícito proveniente de la salida de cocaína de Venezuela, con la participación del Cartel de los Soles, cuyo control ejercen Nicolás Maduro y el ministro Diosdado Cabello.

“Si cada cargamento de 2,500 kilos en promedio representa 64 millones de dólares y se envían de cuatro a seis veces por semana, estamos hablando de miles de millones de dólares al año. Y esto es muy crítico porque ese dinero del narcotráfico mantiene la represión contra los opositores al régimen”.

Según el informe del Instituto del que es cofundador Romero, el Cartel de los Soles “se ha infiltrado en entidades como CODAI, ZODI y REDI, coordinándose para manipular los tiempos de apagado de los radares, facilitando así el paso de aeronaves ilícitas sin ser detectadas”.

“El accidente del Citation YV3217 junto con la deserción de varios sargentos de la Fuerza Aérea, revela profundas fracturas internas y una completa politización del aparato de defensa”.

Complicidad Trasnacional

El dinero ilícito proveniente de la droga no solo sostiene el régimen, subraya Romero. “También financia campañas como fue el caso de México con la que el partido Morena de Andrés López Obrador ganó”.

El grueso reporte sostiene que la cooperación de México ha permitido “un corredor aéreo” con Venezuela “como la principal ruta para el transporte de cocaína hacia Norteamérica, según múltiples informes de inteligencia de la DEA, el Departamento de Estado y la UNODC”.

“Pero el primer conspirador es Colombia”, afirma Romero, al señalar al país catalogado como el primer productor de coca en el mundo con más de 253,000 hectáreas de la droga.

“La política del presidente Gustavo Petro es no hacer erradicación de las hojas de coca y es quien de alguna manera desarrolla la producción de droga”, dice y suma a Brasil en la complicidad con el régimen de Venezuela desde 2005. “Allí presentaron el programa del Socialismo del Siglo XXI y no puede tenerse sin dinero para financiarlo. Si no, ¿cómo paga a un presidente como Evo Morales en Bolivia?”.

Señala que desde territorio brasileño “salen cientos de toneladas de cocaína hacia Europa”. “Su problema ahora es el narcotráfico”

El cuadro de complicidades representa una amenaza para la seguridad hemisférica, reitera el experto.

Riesgos para Venezuela

En este panorama, Venezuela estaría atrapada entre la vulnerabilidad de su espacio aéreo que favorece el deterioro de los radares que el propio régimen permitió, así como el nuevo escenario político-militar que impone el conflicto de EEUU con Irán.

“Yo no creo que el régimen venezolano pensó que EEUU e Israel irían contra Irán, y ya este no tendrá la misma cooperación con Venezuela, a la que enviaba armamentos, drones, lanchas misilísticas y radares; eso ya se acabó”, afirma Romero.

El régimen de Maduro no podría ya contar con los aviones iraníes que permitían los convenios con la República Islámica ni con las lanchas misilísticas que apoyaron a Venezuela en el asedio militar en el mar territorial del Esequibo que se disputa con Guyana, dice.

“Venezuela tiene ahora el problema de que Irán y Rusia no son los mismos socios de hace un mes”, puntualiza para describir el escenario que, tras ataque de EEUU a Irán, le hizo exclamar al ministro de la Defensa de Maduro, Vladimir Padrino: “eso viene pa acá también”.

“Con todo lo que está ocurriendo, el régimen de Venezuela no podrá contar con la ayuda de Irán. Dudo de que esa relación continúe en los mismos términos. Casi todas las semanas aviones de carga iraníes llegaban a Venezuela, eso se acabó”, reitera el experto

Calcula que restaurar el sistema de defensa aéreo supondría comenzar de cero y significaría más de 100 mil millones de dólares. “Y el responsable es el régimen de Maduro”, enfatiza.

FUENTE: Entrevista al comandante Jesús Romero, cofundador del Miami Strategic Intelligence Institute

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