
Un médico de Mission, Texas, fue sentenciado a diez años de prisión federal tras ser hallado culpable de liderar un esquema de fraude médico y lavado de dinero que involucró diagnósticos falsos y tratamientos innecesarios a miles de pacientes.
Según informó KRGV 5 News y Telemundo, Jorge Zamora Quezada, de 68 años, deberá además pagar 28 millones de dólares en restitución a programas de seguros financiados por los contribuyentes, como Medicare, Medicaid, Tricare y Blue Cross Blue Shield (BCBS).
El caso, que se remonta a 2020, reveló un fraude que ascendió a 240 millones de dólares y afectó a más de 10.000 personas.

De acuerdo con la Fiscalía de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Texas, Zamora Quezada, reumatólogo de profesión, fue declarado culpable de conspiración para cometer fraude médico, conspiración para obstruir la justicia y siete cargos de fraude a la atención médica.
Durante más de una década, el médico diagnosticó falsamente a pacientes con enfermedades como artritis reumatoide y otras condiciones degenerativas, con el objetivo de justificar tratamientos costosos e innecesarios.
Entre los procedimientos administrados se incluyeron medicamentos comúnmente utilizados para tratar el cáncer, que provocaron efectos secundarios graves en los pacientes.

Los fiscales detallaron que los tratamientos prescritos por Zamora Quezada causaron daños significativos a la salud de los afectados.
Entre los efectos secundarios documentados se encuentran accidentes cerebrovasculares, necrosis mandibular, caída del cabello, daño hepático y dolores intensos que dificultaban actividades cotidianas como bañarse, cocinar o conducir.
Según la acusación, el médico y sus co-conspiradores presentaron reclamos fraudulentos por un total de 240 millones de dólares a diversos programas de atención médica, de los cuales Zamora Quezada recibió 50 millones.

El juicio, que se extendió por 25 días, incluyó testimonios y evidencias que demostraron el alcance del esquema fraudulento. La fiscalía argumentó que Zamora Quezada atendía un promedio de 1.300 pacientes al año diagnosticados con artritis reumatoide, una cifra significativamente superior al promedio de 400 pacientes diagnosticados por otros médicos de su especialidad.
Además, se reveló que el médico cobró hasta 325 millones de dólares a compañías de seguros médicos durante el tiempo que operó el esquema.
Como parte de la sentencia, el tribunal ordenó el decomiso de bienes adquiridos con las ganancias del fraude. Entre los activos confiscados se encuentran 13 propiedades inmobiliarias, un jet privado y un automóvil de lujo Maserati GranTurismo.
Además, los 28 millones de dólares que Zamora Quezada deberá pagar en restitución se distribuirán entre los programas afectados: más de 20 millones serán destinados a Medicare, 6.4 millones a Medicaid, 615.000 dólares a Tricare y 905.000 dólares a BCBS. Este monto deberá ser abonado una vez que el médico cumpla su condena.
Durante la audiencia de sentencia, el juez encargado del caso señaló que Zamora Quezada actuó motivado por la avaricia, describiendo cómo “estaba intoxicado por el dinero mientras intoxicaba a sus pacientes”. El médico, quien acordó no apelar la sentencia, cumplirá además tres años de libertad supervisada tras su liberación.
El caso de Zamora Quezada ha generado indignación debido al impacto devastador en la salud de los pacientes afectados y al abuso de confianza en el sistema de atención médica.
Según informaron KRGV 5 News y Telemundo, este esquema no solo representó un fraude económico de gran magnitud, sino que también dejó secuelas físicas y emocionales en miles de personas que confiaron en el médico para recibir un tratamiento adecuado.