Un nuevo estudio publicado en la revista Health Data Science reveló que las personas que experimentan sentimientos de soledad tienen un 24% más de probabilidades de desarrollar pérdida auditiva, en comparación con quienes no albergan esta sensación.
Esta investigación, liderada por la Universidad de Tianjin, en China, en colaboración con otras instituciones internacionales, analizó datos de casi medio millón de personas del UK Biobank a lo largo de más de 12 años.
Los investigadores observaron que esta relación se mantiene incluso al considerar variables como edad, sexo, salud mental, condiciones médicas preexistentes, estilo de vida, medicamentos ototóxicos, aislamiento social e incluso factores genéticos. Lo anterior resalta la influencia directa que puede tener la percepción emocional de soledad sobre la salud auditiva, más allá de otros factores biológicos o ambientales.

La soledad y su impacto silencioso
Dentro del estudio se halló, principalmente, la relación específica entre la soledad y la pérdida auditiva sensorineural, una condición que afecta la cóclea o los nervios auditivos, dificultando la correcta transmisión del sonido al cerebro. Este tipo de pérdida auditiva es permanente y suele avanzar de manera progresiva, por lo que identificar factores de riesgo como la soledad se vuelve clave para prevenirla o detectarla a tiempo.
Las investigaciones también revelaron que los efectos fueron más notorios en mujeres que en hombres, lo que podría deberse a diferencias biológicas y sociales en la forma en que ambos géneros experimentan y procesan la soledad.
Otros posibles mecanismos que explicarían esta asociación, de acuerdo con el estudio, se incluyen procesos como la inflamación crónica inducida por el estrés social, un aumento en la presión arterial, cambios en el sistema neuroendocrino y hábitos no saludables que se presentan con más frecuencia en personas solitarias.
Los investigadores señalaron que aún se requieren más estudios para entender completamente esta diferencia, pero destacaron la importancia de abordar la salud emocional como parte del cuidado preventivo integral.
Un llamado a intervenir desde lo emocional
Los resultados del estudio también resaltaron la urgencia de incluir el bienestar emocional dentro de las estrategias de prevención en salud auditiva. Y es que gracias a esta investigación, se demostró que la soledad no solo afecta el estado de ánimo, sino que también puede tener consecuencias físicas serias. Por ello, los expertos sugieren implementar programas de apoyo comunitario, promover vínculos sociales y brindar atención psicológica temprana.
Estudios anteriores refuerzan el nuevo descubrimiento al demostrar que vivir en soledad también puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, deterioro cognitivo y mortalidad prematura. Este nuevo hallazgo refuerza la idea de que acompañar a las personas emocionalmente es tan importante como atenderlas médicamente.
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