Un Real Madrid adicto al drama y la agonía se volvió a ver este martes en el Santiago Bernabéu. Los dirigidos por Carlo Ancelotti avanzaron a una nueva final de la Copa del Rey tras un sufrido y trabajado empate a cuatro goles ante la Real Sociedad en prórroga.
El encuentro empezó cuesta arriba desde el primer tiempo. Los blancos llegaban con 0-1 de ventaja gracias al gol de Endrick en Anoeta. Al minuto 16 la Real pegó primero e igualó las acciones gracias a un tanto de Barrenetxea tras quedar mano a mano con Lunin y definir entre sus piernas.
Endrick, el héroe silencioso y pichichi de la Copa del Rey
Fue el héroe en el partido de ida y no decepcionó en la vuelta. El brasileño de 18 años empató el duelo al 30’ luego de recibir una asistencia tres dedos de Vinícius Jr. que lo dejó solo contra Remiro.
Sobrado de calidad, la joya sudamericana se tomó todo el tiempo del mundo para sacarse una vaselina de chistera que no solo bañó al guardameta visitante, sino que levantó a los hinchas de sus asientos.
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