
La carbonada de pollo es un plato lleno de tradición, especialmente durante el invierno argentino. El aroma a verduras frescas, calabaza, choclo y pollo, aporta un giro más ligero y sencillo, perfecto para quienes buscan una versión rápida y menos pesada que la tradicional con carne vacuna.
Esta receta nació como variante de la carbonada criolla que llegó a la Argentina con los colonizadores y se popularizó por su practicidad y el buen aprovechamiento de los recursos de la huerta. La carbonada tradicional suele prepararse con carne de vaca, pero el pollo la convierte en una propuesta más liviana, ideal para todos los días. No faltan las versiones familiares que agregan arroz, ciruelas secas o incluso duraznos en almíbar, reflejando el carácter abierto y creativo de la cocina criolla. Es típica del noroeste y Cuyo, donde se sirve en cazuelas de barro y acompaña celebraciones patrias, aunque en casa se disfruta todo el año.
La carbonada de pollo es una opción ideal si se busca un guiso rápido, liviano y rendidor. La receta emplea supremas o muslos deshuesados y verduras muy accesibles: zapallo, papas, zanahorias, choclo y tomate, perfumados con hojas de laurel y un toque de azúcar para realzar el dulzor natural del plato. Se prepara en una sola olla y no requiere más de 45 minutos, es decir, mucho sabor con poco esfuerzo.
El resultado es un estofado bien jugoso y colorido, con pollo tierno, verduras bien cocidas y ese característico equilibrio entre el dulzor y el punto ligeramente ácido del tomate. Es perfecto para toda la familia, admite variantes y, si se quiere, se puede completar con un poco de arroz o cebada.
Tiempo total: 45 minutos.
- Preparado de ingredientes: 10 minutos.
- Cocción del pollo: 5 minutos.
- Cocción de la carbonada y verduras: 30 minutos.
- 600 g de pechugas o muslos de pollo deshuesados, en cubos
- 2 cebollas medianas picadas
- 1 diente de ajo picado
- 1 morrón rojo en tiras
- 3 papas medianas en cubos
- 300 g de zapallo (anco o calabaza) en cubos
- 2 zanahorias en rodajas
- 2 tomates pelados y picados (o 1 lata de tomate perita)
- 1 choclo desgranado o en rodajas gruesas
- 2 cucharadas de aceite
- 1 cubito de caldo de verdura (opcional)
- 1 hoja de laurel
- Sal y pimienta a gusto
- 1 cucharada de azúcar (opcional, realza el dulzor)
- Agua cantidad necesaria (aprox. 750 ml)

- En una olla grande, calentar el aceite. Dorar el pollo en cubos salpimentados por 2-3 minutos hasta sellar ligeramente.
- En la misma olla, agregar las cebollas, el ajo y el morrón. Freír moviendo unos minutos hasta transparentar.
- Sumar las papas, las zanahorias, el zapallo, los tomates, el choclo y la hoja de laurel. Volver a incorporar el pollo.
- Agregar el cubito de caldo desmenuzado y el azúcar. Cubrir apenas con agua caliente, revolver y tapar la olla.
- Cocinar a fuego bajo, semitapado, durante unos 30 minutos, hasta que las verduras estén cocidas y la preparación bien jugosa.
- Probar e incorporar sal y pimienta antes de servir. Acompañar con arroz blanco o pan fresco.
Esta receta rinde 4 porciones abundantes de carbonada de pollo.
Cada porción contiene aproximadamente:
- Calorías: 320
- Grasas: 7 g
- Grasas saturadas: 1,5 g
- Carbohidratos: 40 g
- Azúcares: 7 g
- Proteínas: 25 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
La carbonada de pollo se puede conservar en la heladera hasta 3 días en un recipiente tapado. También es posible congelarla hasta 2 meses, en porciones individuales.