
Una salvavidas fue hospitalizada este miércoles por la mañana tras sufrir un accidente inusual en una playa de Nueva Jersey: una sombrilla la atravesó a la altura del hombro izquierdo, penetrando su cuerpo y sobresaliendo por la parte trasera del brazo. La joven, que se encontraba consciente y alerta en todo momento, fue atendida en el lugar por sus compañeros de trabajo y luego trasladada a un centro médico, informaron las autoridades locales.
El incidente ocurrió cerca de la torre de vigilancia donde la mujer realizaba su jornada laboral como parte del equipo de salvavidas. Según el jefe del Departamento de Bomberos de Asbury Park, Kevin Keddy, la víctima fue encontrada en el suelo con una estaca de sombrilla incrustada en la parte frontal del hombro y con cerca de 30 centímetros del objeto sobresaliendo por la parte posterior del brazo.
La rápida actuación de los primeros respondientes fue crucial. “Ella estaba siendo atendida por otros salvavidas cuando llegamos”, declaró Keddy. El equipo de bomberos asumió el control de la situación, estabilizó a la joven en el lugar y procedió a cortar la sombrilla en ambos extremos para facilitar el tratamiento y su eventual traslado. ABC News fue el primer medio en reportar los detalles del suceso.

El procedimiento de rescate requirió precisión y cuidado. El Departamento de Bomberos, tras evaluar la gravedad de la herida, decidió cortar la estaca metálica tanto en su extremo anterior como posterior para evitar mayores daños al mover a la paciente. Según relató Keddy, esta maniobra fue necesaria para hacer la herida “más manejable”.
“Es una joven fuerte”, agregó el jefe del cuerpo de bomberos, al destacar la entereza con la que la mujer soportó el accidente. La herida, aunque grave, no provocó la pérdida de conciencia de la víctima en ningún momento, lo que facilitó la estabilización y el transporte a un hospital, señaló.
Paramédicos llegaron poco después para continuar con la atención médica y completar el traslado al centro de salud más cercano. Por razones de privacidad, no se ha revelado el nombre de la víctima ni el hospital al que fue llevada.
Las circunstancias exactas que llevaron al accidente no fueron inmediatamente aclaradas. Hasta el momento, no se ha confirmado si el objeto fue impulsado por una ráfaga de viento u otra causa externa. Sin embargo, los funcionario locales han aprovechado la ocasión para reiterar recomendaciones de seguridad a los visitantes de la playa.
El jefe Keddy ofreció una advertencia clara a los visitantes en este verano: “Siempre aseguren bien las sombrillas en la arena y llévenlas con la punta hacia abajo”. A falta de una investigación más detallada, esta sugerencia apunta a prevenir que sombrillas mal aseguradas se conviertan en proyectiles peligrosos.
El hecho de que una sombrilla—objeto de uso común en playas durante esta época—haya causado una herida de esta magnitud pone en evidencia los riesgos potenciales de descuidar medidas básicas de seguridad.

Aunque poco frecuente, este tipo de accidentes ha sido registrado en otros puntos del país. En años anteriores, sombrillas desancladas por fuertes vientos han lesionado a bañistas en diversas playas, en algunos casos con consecuencias fatales. Si bien este incidente no ha cobrado víctimas mortales, la gravedad de la herida subraya la necesidad de vigilancia continua y responsabilidad individual.
Las autoridades municipales de Asbury Park aún no han emitido un comunicado oficial más allá de las declaraciones del jefe del cuerpo de bomberos. Tampoco se ha confirmado si se abrirá una investigación formal para determinar las condiciones climáticas en el momento del accidente o la posible responsabilidad de terceros.
Por ahora, la prioridad permanece en la recuperación de la joven salvavidas, cuya profesionalidad y fortaleza quedaron de manifiesto ante la adversidad. “Ella no perdió la conciencia, estaba completamente en alerta”, instó Keddy en declaraciones recogidas por ABC News.